14 octubre 2025

Y no es soberbio el amor,

como algunos dicen, sino humilde, agradable y manso, y tanto que suele perder de su derecho por no dar a quien bien quiere pesadumbre; y más, que, como todo amante tiene en sumo precio y estima la cosa que ama, huye de que de su parte nazca alguna ocasión de perderla.

(Los trabajos de Persiles y Sigismunda)



12 octubre 2025

Ni la menor duda

 …creo que hasta el cambio de relaciones entre Guido y yo empezó el día en que me avine a ocultar algo a mi marido.



Guido era su jefe, con el que empezó a tontear hasta que se impuso la cordura (Valeria, en Cuaderno prohibido)


11 octubre 2025

El sentido de la historia

La historia no tiene un fin en sí misma, sino que se halla, el fin, fuera de ella, en la eternidad. Es, pues, como cabía esperar en Berdiaev, una visión cristiana de la historia. La cual no es más que un eón dentro del plan divino, puesto en marcha, este eón, por la libertad humana. Concretamente, dice Berdiaev, es la libertad para el mal lo que pone en marcha la historia, lo que nos hace suponer que el autor piensa que, si el hombre no hubiera empleado su libertad para el mal, probablemente no tendríamos historia sino otra cosa. Pero eso no lo deja claro.

Según Berdiaev, nos hallamos empezando la época que sucede al Renacimiento, caracterizada por una nueva barbarie cuyas caras más visibles son el capitalismo y el socialismo, éste consecuencia de aquél. La edad antigua se habría caracterizado por una vida del hombre a ras de naturaleza, dando a este concepto un carácter negativo, opuesto a lo espiritual. Fue en la Edad Media cuando el cristianismo se encargó de llenar de espiritualidad al ser humano, el cual acumularía unas fuerzas que desplegó en el Renacimiento, época de creatividad y de libertad, pues él considera que en el mundo medieval esta libertad se encontró represada, no sabemos por qué, o al menos a mí no me queda claro. Pero el Renacimiento se empeñó en volver a lo clásico, cosa que ya no era posible dentro de la nueva espiritualidad cristiana. Por eso acabó por agotarse y aquí estamos, en una nueva barbarie que espera su nueva edad media (título de una de sus obras más conocidas y poco editadas).

He dicho dos veces que algo no me quedaba claro, pero no quiero dar la impresión de que el libro es oscuro. Antes bien, estas tesis quedan bien explicadas y no dejan de resultar convincentes en lo fundamental. Como filósofo de la historia, fue Berdiaev uno de los mejores intérpretes de su tiempo.

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06 octubre 2025

Suele olvidarse

que la aceptación es una de las formas capitales de la realización de la libertad. […] Sigismunda no prefiere, no elige. Como decíamos, su modo de elegir consiste en la manera de aceptar. O, si se quiere, obedecer; en ello cifra su libertad. Recuérdese [sic] las palabras que dice Auristela a Periandro: “Mi albedrío lo es para obedecer” (I, 106).

Luis RosalesCervantes y la libertad, segunda parte, capítulo III


O, como diría Kierkegaard, “su libertad es inclinarse ante el poder eterno”.

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04 octubre 2025

Pasma

Un tipo pide cinco mil dólares para no matar a un concejal. Unos niñatos salvajes se dedican a quemar vagabundos. Dos italianos preparan un golpe en una sastrería. Lo que no imaginaban los detectives de la comisaría del distrito 87 es que iban a liquidar los tres asuntos de una carambola triunfal, después de muchos afanes, sonados fracasos y algunos muertos. En definitiva, el Ed McBain de costumbre, cruzando tramas de modo rocambolesco e insertando otras más de comedia, como la del detective Meyer y su antojo de llevar a los tribunales a una escritora que le ha copiado el nombre para titular una novela. Los detectives más simpáticos del universo negro, sin duda. Y lo mismo hay que decir del narrador. Sólo Ed McBain podría abrir así un capítulo:

A nadie le gusta trabajar en sábado.

Tiene algo de indecente, va contra la naturaleza humana. El sábado es el día que antecede al domingo y el más idóneo para dar una patada a las tensiones […] Con un sábado tan encantador, qué mejor que encender un fuego en la chimenea de tu pisito, encender un cigarrillo y olvidarse del mundo…

Y así. Lo que no obsta para que las situaciones, objetivamente, sean tan violentas como las que más en este género. Hay quien exagera el punto trágico. McBain lo desdibuja con su narración casi coloquial y sus diálogos chispeantes y resulta incluso más eficaz.

El título, por su parte, responde a otro de los rasgos de este autor, y es que los policías no son solo protagonistas por investigar y resolver el caso, sino por ellos mismos y sus circunstancias, reflejadas, ya digo, con una retranca tan fina como amable, en las antípodas del héroe de Mankell, por ejemplo, siempre tan agonías.

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01 octubre 2025

Es interesante que Azaña

diga a Rivas Cherif, en marzo de 1936, que

el pánico de un movimiento comunista es equivalente al pánico de un golpe militar*,

porque ahora se nos quiere hacer creer que tal peligro no existía y fue un invento de las derechas.



*Carta del 29.03.1936, citada por del Rey y Álvarez Tardío en Fuego cruzado.

 

29 septiembre 2025

Los espíritus violentos

se sirven de los hombres ilustrados cuando quieren triunfar sobre el poder establecido, pero cuando se trata de mantenerse en él, suelen mostrar un desprecio grosero por la razón.


Mme. De Staël, La literatura y su relación con la sociedad, segunda parte, capítulo III.